BUFETE PÉREZ MARÍN comenzó su andadura profesional en el año 1960, algo que nos otorga más 50 años de experiencia. Sus socios fundadores combinaban el ejercicio profesional de la abogacía con el desempeño de funciones directivas en la Administración General del Estado y en la Administración Local. Toda esa experiencia acumulada desde dentro y desde fuera de la Administración, unido a su buen hacer profesional, han hecho posible que hoy día BUFETE PÉREZ MARÍN sea una «marca» de referencia en cualquier sector del Derecho administrativo y en especial en urbanismo, expropiaciones, aguas, minas, función pública y administración local.

En BUFETE PÉREZ MARÍN confluyen dos generaciones de Abogados que se solapan para garantizar al cliente experiencia, conocimientos y plena dedicación. El grupo de Letrados que lo conforman gozan a nivel individual del máximo reconocimiento profesional. En los últimos años BUFETE PÉREZ MARÍN ha incorporado firmas de prestigio para cubrir también con todas las garantía asuntos de Derecho Laboral, Mercantil, Civil, Familia y Penal.

VALORES | BUFETE DE ABOGADOS

Somos un bufete abierto y generoso, cuya experiencia ha estado siempre a disposición de quienes se inician en el ejercicio de la abogacía. Por nuestro despacho han pasado numerosos profesionales que hoy día tienen sus propios Bufetes y siguen en contacto con el nuestro, porque la máxima que guía a los fundadores es «crecer para compartir».

Estudio y formación continuada es otra de las máximas de BUFETE PÉREZ MARÍN que cuenta con un servicio de publicaciones tiene en su haber varios libros y artículos doctrinales en revistas especializadas, en los que se analizan temas jurídicos de interés general, así como las últimas reformas legislativas y la jurisprudencia más novedosa, que se analizan también en seminarios donde se ponen en común los asuntos más complejos, siempre en la línea del desempeño de un ejercicio profesional eficaz y garantista.

BUFETE PÉREZ MARÍN opera desde la plena independencia: «El letrado sólo está sometido a la Ley y a su cliente». Ejercicio profesional donde priman la total accesibilidad y disponibilidad, la lealtad con los otros operadores jurídicos sin merma de la defensa incondicional del cliente y la plena entrega para la mejor defensa de los asuntos encomendados